Cuando nos estamos metiendo en esto de la fotografía cometemos errores de todo tipo, que van desde quemar las fotos hasta olvidarnos de quitar la tapa del lente (que me sigue pasando).

Ser consciente de nuestros errores nos ayudará a evitarlos, por ello aquí enlistaré algunos de los errores más comunes que solemos cometer al iniciar en la fotografía.

Disparar en modo automático

Es común al comenzar con la fotografía que hagamos fotos en el modo automático de la cámara porque ‘‘da buenos resultados’’, sin tener que configurar nada.

Desde mi punto de vista hay algunos vicios en el rollo de disparar en automático:

No aprendes a controlar los parámetros de tu cámara y usar estos a conveniencia según la situación. El automático expone bien y demás, sin embargo, tú no estás aprendiendo a identificar qué tanto debes abrir o cerrar el diafragma, qué ISO y velocidad de obturación usar.
La cámara hará la foto que ella crea correcta y tú solo serás un sujeto que pulsa un botón. Cuando la idea es que seas tu quien le indique a la cámara qué y cómo quieres que sea la fotografía.

Entonces, evita lo más que puedas hacer fotografías con el modo automático y comienza a darle caña a los parámetros manuales, porque así, incluso quemando o subexponiendo las fotos, aprenderás a dominar la luz.

Meterle contraste a tope

Algo que yo veo con frecuencia en fotógrafos principiantes es que hacen una fotografía y al momento de editar se les va la olla con el contraste.

Y no digo que contrastar los colores claros de los oscuros esté mal, ya que sí se utiliza bien, puede realzar los colores y la belleza de un paisaje, por ejemplo.

Sin embargo, cuando se hace mal le quitan naturalidad y equilibrio a la fotografía.

No tener referencias

Todo lo que vemos visualmente nos ayudará a desenvolvernos mejor al hacer fotografía. Y si no tienes referencias de fotos, pinturas o videos te limitará un poco.

Una de las mejores formas de aprender este arte, es analizando el trabajo de otros fotógrafos, luego aplicarlo al hacer fotos e intentar conseguir resultados similares.

¿Cómo puedes analizar las fotos o el cine? Fíjate en los planos que utilizan, qué historia cuenta cada imagen, como encuadran, la forma en que incide la luz en los sujetos, qué tipo de focal están utilizando y el color de cada foto.

Conocer el arte de diferentes fotógrafos o cineastas te permitirá ampliar tu conocimiento, a tener más ideas y creatividad para hacer fotos geniales.

Encuadrar todo en el centro

Es un error común que puede limitar la composición y hacer que las imágenes se vuelvan monótonas y predecibles.

Al colocar el sujeto principal en el centro, se pierde la oportunidad de crear interés visual y de guiar la mirada del espectador hacia otros elementos de la imagen.

Vale decir que en ocasiones si funciona poner el objeto o sujeto principal en el centro, pero en otras, resta en lugar de sumar.

La regla de los tercios puede servirte para mejorar la composición de tus fotografías, ayudándote a crear imágenes más equilibradas y atractivas.

Al situar el sujeto en puntos de interés o líneas imaginarias, se generan composiciones más dinámicas y agradables a la vista.

Agregar elementos que no suman

¿Has escuchado la frase de menos es más? Bueno, este concepto es muy aplicado en la fotografía.

La idea de este es que la composición sea simple y que no distraiga a los diferentes objetos, para así poder destacar al sujeto principal de la fotografía.

Esta simplicidad en la composición ayudará a transmitir el mensaje de forma clara y atractiva al espectador.

Así que al momento de hacer una foto evita a toda costa poner objetos que no le sumen nada al personaje principal, mejor aún, quita todo aquello que distraiga.

Cortar las fotos en el lugar incorrecto

Al hacer las fotos tenemos que tener en cuenta como se ven los elementos principales dentro del encuadre, ya sea un paisaje, un producto, modelo o una casa, ya que si recortamos partes esenciales podemos afectar la composición y la narrativa de la imagen.

Es fundamental tener cuidado al encuadrar y asegurarse de que el sujeto principal esté completo y no se vea cortado en un lugar que le reste estética a la foto.

Esto garantiza que la imagen transmita su mensaje de manera clara y efectiva.

No usar trípode

Si quieres conseguir efecto seda en tus fotos, hacer fotos de las estrellas, capturar estelas de luz con el paso de los carros, hacer bracketing de enfoque, HDR, planos cenitales de producto o simplemente hacer fotos nítidas en condiciones de poca luz, es elemental tener un trípode.

Hacer cualquiera de estas fotografías a pulso es casi imposible, ya que cualquier movimiento, por mínimo que sea, dañará la foto final.

Así que al iniciar en fotografía ten muy en cuenta tener un trípode, ya que te permitirá mejorar la calidad y nitidez de las fotografías, brindando más control y posibilidades creativas en cuanto a composición.

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No dejar espacios negativos

Es común que cuando comenzamos a hacer fotos no posicionamos bien los elementos principales y parecieran estar apretados dentro del encuadre.

El espacio negativo en fotografía se refiere al espacio vacío o en blanco que rodea y se encuentra entre los sujetos principales de una imagen. Por ejemplo, una persona mirando hacia un lado, dejando un espacio en blanco hacia donde va la mirada.

Es el espacio que se utiliza estratégicamente para resaltar y enfocar la atención en el sujeto principal.

Tener esto en cuenta permite crear un equilibrio visual, proporcionar un sentido de profundidad y dar una sensación de calma o soledad en la imagen.

¿Quieres evitar errores y mejorar tu fotografía?

Si te interesa aprender y dominar el arte de la fotografía, te recomiendo visitar el curso de iniciación a la fotografía de Kike Arnaiz, en este aprenderás conceptos técnicos, trucos y ejemplos prácticos que te permitirán mejorar tus resultados fotográficos.